Di Stéfano: El Director del "Ballet Azul"


Había más de 5.000 aficionados en el aeropuerto El Dorado. Aquella mañana del jueves 11 de agosto de 1949, El Tiempo había titulado: “Hoy llega a Bogotá el delantero más rápido y veloz del continente”. Don Alfonso Senior, presidente de Millonarios, había viajado hasta Cali para darle la bienvenida a él y a su compañero y entrañable amigo Néstor “Pippo” Rossi, después de un largo vuelo que había hecho escala en Santiago de Chile, Lima y ahora en la capital del valle con destino a Bogotá. En Buenos Aires la salida de los jugadores no había sido muy agradable. Después de varios meses de plantarle cara a la AFA y a al club, defendiendo sus derechos como trabajadores, el presidente de River los había despedido con un “se pueden ir y si se quieren morir allí, se mueren allí”. Los directivos rioplatenses habían estipulado unos topes salariales para sus estrellas, ampliamente superados  por las ofertas provenientes del norte del continente. Ante la negativa de renegociar sus contratos, Alfredo Di Stéfano y Nestor Rossi, habían decidido empacar maletas y volar rumbo a Bogotá para jugar en Millonarios donde ya se encontraba su ex compañero Adolfo Pedernera. Las amenazas de quedar por fuera de la tutela de la FIFA no los amedrentó. “No podíamos desperdiciar esa oportunidad, además de ser una nueva aventura en un fútbol que quería progresar, nunca había visto más dinero en mi vida”, cuenta en Alfredo en “Gracias Vieja”, el libro que recopila sus memorias como futbolista. En su primer partido con la camiseta azul de Millonarios, Di Stéfano responde a todas las expectativas. Aquel día más de 20.000 hinchas abarrotaron el estadio El Campín para ver su debut con dos goles en el partido frente al Barranquilla. El argentino demuestra ampliamente sus credenciales como goleador y comienza el romance con el exigente público capitalino. Ese mismo romance que no tardaría en convertirse en idolatría, cuando con un gol suyo el “ballet azul”, rótulo que le habían puesto los periodistas al Millonarios de la época, conseguía el primer titulo con un disparo suyo de larga distancia, que permitió la victoria 3 -2 frente a un enconado Deportivo Cali en el partido de desempate después de igualar a 44 puntos en la tabla general del campeonato. Su sociedad con Adolfo Pedernera y Néstor Raúl Rossi se afianzó, además Millonarios decidió contar con otro argentino en sus filas, el portero Julio Cozzi que llegaba para la temporada 1950, pero pese a funcionar como una maquina bien afinada, sorpresivamente, el equipo pierde el titulo por dos puntos frente al Deportes Caldas. En su tercera temporada continúo la cosecha de buenos resultados. Di Stéfano demostró todo su poderío goleador. Su velocidad y destreza, aparte de su fuerte remate con cualquiera de las dos piernas, fueron las armas letales que empleó para conseguir 31 goles que ratificaron a el equipo 'albiazul' como el mejor del país coronándose por segunda vez campeón. Llegaría 1952, año determinante en su carrera y para el prestigio del balompié colombiano en el mundo. El Club Deportivo Los Millonarios es invitado a las bodas de plata del Real Madrid, al cual ya había derrotado la temporada anterior en la pequeña Copa del Mundo de Caracas por marcador de 2-1. “Como nos ganaron, debieron pensar, a estos los invitamos al cincuentenario y les ganamos también, pero tuvieron la mala suerte de que los campeones del triangular fuimos nosotros”, cuenta en sus memorias refiriéndose al hecho. Millonarios haría un recorrido por Valencia, Las Palmas, Madrid y Sevilla. El único problema que tenía, el popular 9,  era el viaje por aire. Desde su llegada a Colombia había desarrollado un temor casi fóbico a los aviones, y ahora debería aguantar los trayectos entre Bogotá – Panamá, Panamá – New York, New York – Madrid y además de nueve horas para llegar en autobús a Valencia. Su primer partido en España fue contra el Valencia, más de 50.000 personas se congregaron en el estadio para ver el partido, la cancha estaba húmeda y pese al cansancio, hizo un muy buen partido. Le cometieron un penalti que el arbitro no sancionó y finalmente el marcador fue de 0-0. Pocos días el rival de enfrente sería Las Palmas, campo en el cual el equipo colombiano cosechó su primera victoria en tierras ibéricas por un marcador de 3-2, Di Stéfano estuvo muy activo y marcó uno de los goles. Llega el esperado estreno en Madrid. Millonarios se enfrentaba en primera instancia al Norkoping de Suecia en el triangular en el cual el Real Madrid iniciaba las celebraciones. Al conocer ya sus capacidades dos hombres van a marcarle pero no pueden anular su genialidad, el juego termina 2-2 y se escuchan muy buenos comentarios sobre él en la prensa madrileña, inclusive empiezan a especular con su posible fichaje para el club blanco. El día en el que el Real Madrid, dirigido por el uruguayo Héctor Scarone,  debutaba en el torneo  había 70.000 personas en el estadio, al frente, un onceno suramericano liderado por un rubio de ojos claros vistiendo camisas azules. El temporal había arreciado y el campo estaba en muy malas condiciones, llovió durante todo el partido pero eso no pudo impedir que “la saeta” sacará sus mejores galas a relucir y marcará dos soberbios golazos para hacer posible una de las victorias más grandes de las que se tenga noticia de un equipo colombiano. 4-2 fue el marcador y a la postre Millonarios se quedaría con el titulo del triangular, pese a que en su siguiente partido, el Real Madrid venciera al equipo sueco. La gira terminó en Sevilla donde empataron 1-1, Alfredo marcó el único gol y Rossi desperdició una pena máxima que hubiera significado la tercera victoria en tierras europeas. El equipo 'embajador' como se le empezó a conocer en aquel momento,  culmina su paso por España invicto y dejando una excelente impresión. A mediados de ese mismo año Real Madrid motivado por el buen juego del equipo colombiano lo visita en Bogotá con 50.000 espectadores en las gradas de El Campin que presencian una nueva victoria de la banda de Di Stéfano. El equipo español se adelanta por medio de Olsen, Alfredo, en una jugada llena de elegancia y habilidad, sorteando la defensa contraria, empata el marcador, luego Adolfo Pedernera pone el 2-1. Como conclusión de la visita del equipo español, dos días después se jugaría la revancha. Esta vez un gol de Ernesto Baéz inflige la tercera derrota del cuadro merengue a expensas, del catalogado en ese momento “mejor equipo del mundo”. Todo no pararía allí, faltaría un último partido por la pequeña Copa del Mundo en Caracas que se saldaría con un empate a uno. Santiago Bernabeu, presidente madridista quería su fichaje a toda costa, más adelante tendría a su archirrival deportivo, el Barcelona,  disputándole el privilegio. Después de ser goleador de la temporada y su ilustre presentación por las canchas europeas Alfredo Di Stefano se fue. Millonarios debía disputar un torneo en Chile y “la saeta”, igual de ligero como era en las canchas, marchó a su país para no regresar. La situación en Colombia había cambiado, cada vez iba menos gente a los estadios y se dificultaba cobrar hasta el salario. Alfonso Senior fue a buscarlo a Buenos Aires pero nada lo pudo hacer cambiar de decisión, el jugador más grande que ha pisado las canchas colombianas buscaría un nuevo destino que lo encumbraría aun más en el Olimpo del fútbol. Había más de 5.000 aficionados en el aeropuerto El Dorado. Aquella mañana del jueves 11 de agosto de 1949, El Tiempo había titulado: “Hoy llega a Bogotá el delantero más rápido y veloz del continente”. Don Alfonso Senior, presidente de Millonarios, había viajado hasta Cali para darle la bienvenida a él y a su compañero y entrañable amigo Néstor “Pippo” Rossi, después de un largo vuelo que había hecho escala en Santiago de Chile, Lima y ahora en la capital del valle con destino a Bogotá. En Buenos Aires la salida de los jugadores no había sido muy agradable. Después de varios meses de plantarle cara a la AFA y a al club, defendiendo sus derechos como trabajadores, el presidente de River los había despedido con un “se pueden ir y si se quieren morir allí, se mueren allí”. Los directivos rioplatenses habían estipulado unos topes salariales para sus estrellas, ampliamente superados  por las ofertas provenientes del norte del continente. Ante la negativa de renegociar sus contratos, Alfredo Di Stéfano y Nestor Rossi, habían decidido empacar maletas y volar rumbo a Bogotá para jugar en Millonarios donde ya se encontraba su ex compañero Adolfo Pedernera. Las amenazas de quedar por fuera de la tutela de la FIFA no los amedrentó. “No podíamos desperdiciar esa oportunidad, además de ser una nueva aventura en un fútbol que quería progresar, nunca había visto más dinero en mi vida”, cuenta en Alfredo en “Gracias Vieja”, el libro que recopila sus memorias como futbolista. En su primer partido con la camiseta azul de Millonarios, Di Stéfano responde a todas las expectativas. Aquel día más de 20.000 hinchas abarrotaron el estadio El Campín para ver su debut con dos goles en el partido frente al Barranquilla. El argentino demuestra ampliamente sus credenciales como goleador y comienza el romance con el exigente público capitalino. Ese mismo romance que no tardaría en convertirse en idolatría, cuando con un gol suyo el “ballet azul”, rótulo que le habían puesto los periodistas al Millonarios de la época, conseguía el primer titulo con un disparo suyo de larga distancia, que permitió la victoria 3 -2 frente a un enconado Deportivo Cali en el partido de desempate después de igualar a 44 puntos en la tabla general del campeonato. Su sociedad con Adolfo Pedernera y Néstor Raúl Rossi se afianzó, además Millonarios decidió contar con otro argentino en sus filas, el portero Julio Cozzi que llegaba para la temporada 1950, pero pese a funcionar como una maquina bien afinada, sorpresivamente, el equipo pierde el titulo por dos puntos frente al Deportes Caldas. En su tercera temporada continúo la cosecha de buenos resultados. Di Stéfano demostró todo su poderío goleador. Su velocidad y destreza, aparte de su fuerte remate con cualquiera de las dos piernas, fueron las armas letales que empleó para conseguir 31 goles que ratificaron a el equipo 'albiazul' como el mejor del país coronándose por segunda vez campeón. Llegaría 1952, año determinante en su carrera y para el prestigio del balompié colombiano en el mundo. El Club Deportivo Los Millonarios es invitado a las bodas de plata del Real Madrid, al cual ya había derrotado la temporada anterior en la pequeña Copa del Mundo de Caracas por marcador de 2-1. “Como nos ganaron, debieron pensar, a estos los invitamos al cincuentenario y les ganamos también, pero tuvieron la mala suerte de que los campeones del triangular fuimos nosotros”, cuenta en sus memorias refiriéndose al hecho. Millonarios haría un recorrido por Valencia, Las Palmas, Madrid y Sevilla. El único problema que tenía, el popular 9,  era el viaje por aire. Desde su llegada a Colombia había desarrollado un temor casi fóbico a los aviones, y ahora debería aguantar los trayectos entre Bogotá – Panamá, Panamá – New York, New York – Madrid y además de nueve horas para llegar en autobús a Valencia. Su primer partido en España fue contra el Valencia, más de 50.000 personas se congregaron en el estadio para ver el partido, la cancha estaba húmeda y pese al cansancio, hizo un muy buen partido. Le cometieron un penalti que el arbitro no sancionó y finalmente el marcador fue de 0-0. Pocos días el rival de enfrente sería Las Palmas, campo en el cual el equipo colombiano cosechó su primera victoria en tierras ibéricas por un marcador de 3-2, Di Stéfano estuvo muy activo y marcó uno de los goles. Llega el esperado estreno en Madrid. Millonarios se enfrentaba en primera instancia al Norkoping de Suecia en el triangular en el cual el Real Madrid iniciaba las celebraciones. Al conocer ya sus capacidades dos hombres van a marcarle pero no pueden anular su genialidad, el juego termina 2-2 y se escuchan muy buenos comentarios sobre él en la prensa madrileña, inclusive empiezan a especular con su posible fichaje para el club blanco. El día en el que el Real Madrid, dirigido por el uruguayo Héctor Scarone,  debutaba en el torneo  había 70.000 personas en el estadio, al frente, un onceno suramericano liderado por un rubio de ojos claros vistiendo camisas azules. El temporal había arreciado y el campo estaba en muy malas condiciones, llovió durante todo el partido pero eso no pudo impedir que “la saeta” sacará sus mejores galas a relucir y marcará dos soberbios golazos para hacer posible una de las victorias más grandes de las que se tenga noticia de un equipo colombiano. 4-2 fue el marcador y a la postre Millonarios se quedaría con el titulo del triangular, pese a que en su siguiente partido, el Real Madrid venciera al equipo sueco. La gira terminó en Sevilla donde empataron 1-1, Alfredo marcó el único gol y Rossi desperdició una pena máxima que hubiera significado la tercera victoria en tierras europeas. El equipo 'embajador' como se le empezó a conocer en aquel momento,  culmina su paso por España invicto y dejando una excelente impresión. A mediados de ese mismo año Real Madrid motivado por el buen juego del equipo colombiano lo visita en Bogotá con 50.000 espectadores en las gradas de El Campin que presencian una nueva victoria de la banda de Di Stéfano. El equipo español se adelanta por medio de Olsen, Alfredo, en una jugada llena de elegancia y habilidad, sorteando la defensa contraria, empata el marcador, luego Adolfo Pedernera pone el 2-1. Como conclusión de la visita del equipo español, dos días después se jugaría la revancha. Esta vez un gol de Ernesto Baéz inflige la tercera derrota del cuadro merengue a expensas, del catalogado en ese momento “mejor equipo del mundo”. Todo no pararía allí, faltaría un último partido por la pequeña Copa del Mundo en Caracas que se saldaría con un empate a uno. Santiago Bernabeu, presidente madridista quería su fichaje a toda costa, más adelante tendría a su archirrival deportivo, el Barcelona,  disputándole el privilegio. Después de ser goleador de la temporada y su ilustre presentación por las canchas europeas Alfredo Di Stefano se fue. Millonarios debía disputar un torneo en Chile y “la saeta”, igual de ligero como era en las canchas, marchó a su país para no regresar. La situación en Colombia había cambiado, cada vez iba menos gente a los estadios y se dificultaba cobrar hasta el salario. Alfonso Senior fue a buscarlo a Buenos Aires pero nada lo pudo hacer cambiar de decisión, el jugador más grande que ha pisado las canchas colombianas buscaría un nuevo destino que lo encumbraría aun más en el Olimpo del fútbol.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Excelente, hay que escribir con propiedad remitiendose a fuentes histórticas, tal como lo hace el señor que escribe este blog, en verdad un trabajo serio.

Anónimo dijo...

Felicitaciones hombre! Los articulos sobre Man Utd y Di Stefano son muy interesantes y bien redactados. Me gusto mucho saber esta historia del Millonarios, pues ese equipo escribio una de la paginas mas gloriosas del futbol colombiano y dio a conocer internacionalmente Di Stefano; me parece importante recordarlo porque es un jugador que marco el mundo del futbol. Muchos desconocen en Europa la trayectoria de Di Stefano antes de llegar al Real y es bueno que la gente sepa que se hizo conocer en Colombia, hace parte de nuestra labor como colombianos de siempre tener que justificar que tambien hay cosas buenas en Colombia.

LUIS dijo...

muy buenos estos articulos, felicitaciones

Anónimo dijo...

solo tengo una cosa que decir del articulo no fueron las bodas de plata simo la bodas de oro

Anónimo dijo...

LA VERDAD MUY POCOS SABEN DE LA HISTORIA DEL EQUIPO MAS GRANDE DE COLOMBIA,LA EPOCA DEL JINETE DORADO FUE PARA MILLONARIOS LA MEJOR, EL PASO DE DI STEFANO,ROSSI Y PEDERNERA MARCO LA DIFERENCIA DEL FUTBOL EN ESTE PAIS...COMO HINCHA DE MILLONARIOS Y ESTUDIANTE DE COMUNICACION ME PARECE QUE ESTAS HACIENDO UN BUEN TRABAJO MOSTRANDOLE LA HISTORIA DE GRANDES CLUBES A LAS PERSONAS, BUENO CHAO.

Anónimo dijo...

cuando lei diablos rojos pense queiba a hablar del poderoso america de cali , estan interesantes las historias lastima el mal gusto de ser de miyos

Anónimo dijo...

GRACIAS POR ARTICULO!
DEFINITIVAMENTE SE DEMUESTRA UNA VEZ MAS QUE EL EQUIPO MAS GRANDE EN HISTORIA Y EN TITULOS ES SIN DUDA MILLONARIOS. LOS DE AMERICA POR EJEMPLO FUERON ENGRANDECIDOS POR APORTES DE OTRO ESTILO, LOS CUALES NO HAY QUE MENCIONAR. PERO LAS PAGINAS DORADAS DEL FUTBOL FUTBOL COLOMBIANO LAS ESCRIBIO MILLOS! SUS HAZAÑAS HAN TRASPASADO LOS AÑOS. ES Y SERA EL MAS GRANDE DE COLOMBIA.

Mario dijo...

Desde chico que veo mucho futbol y por eso trato de conocer mucho acerca de este maravilloso deporte. Siempre que viajo trato de ver partidos de la liga regionales mas alla de si sean importantes o no. Como ya tengo mis Vuelos a Bogota espero poder ver al Deportivo Cali o al America