El único titulo del Unión Magdalena.


En la historia del fútbol mundial existe una clase de equipos poco publicitados que hacen las delicias de todos los fanáticos de este deporte. Son, como bien se utilizó para algunos grupos musicales, 'one hit wonders'. Conjuntos, que a pesar de estar acostumbrados a militar en primera división y ganar algún titulo, se han adaptado a ver la gloria de lejos y han terminado por trasegar en los lúgubres sótanos del fútbol de su país. En Colombia contamos con dos: Unión Magdalena y Deportes Quindío pero en este post solo hablaremos del momento de gloria del primero.

La gloria le sonrió al 'Ciclón bananero', como popularmente se conoce al Unión,  en la temporada de 1968 después de un regular campeonato anterior. En la competencia no pudo tomarle el pulso al Deportivo Cali que, con 26 puntos de ventaja y nueve puestos más arriba en la tabla, se proclamó campeón por segunda vez en su historia en aquel momento.

Había que empezar de nuevo y entre la directiva existía el deseo de ganar y conseguir el primer titulo nacional para la costa atlántica colombiana. Con este objetivo, se dio un fuerte revolcón en el equipo de la bahía colombiana. Llegó como técnico en propiedad un paraguayo, ex jugador de Pereira en los 50, quien conocía muy bien el medio local, llamado Vicente Sánchez ocasionando así, el nacimiento, en propiedad, de una llave que daría su único éxito al conjunto costeño: la samario-paraguaya.

Del país de los 'defensores del chaco', llegaron algunos refuerzos más que elevaron el nivel del equipo. Entre su nómina el cuadro 'bananero' podía contar con un pletórico Sayas, arquero titular, y jugadores bastante rendidores como Guillén, Schettina y Palacios.

El sistema del torneo se había cambiado para esa temporada de 1968. Se disputarían dos torneos a doble vuelta, Apertura y Clausura. El puntero de cada uno tendría derecho a disputar la gran final del año.

Pronto se vieron los buenos resultados. El Unión Magdalena cabalgó vencedor por todo el Apertura. Permaneció invicto las primeras ocho fechas del campeonato, y al final del ejercicio, sólo contó tres derrotas, asegurándose así su participación en la fiesta decembrina del fútbol colombiano.

Para el torneo Clausura el entrenador paraguayo, después de algunas diferencias con los dirigentes, da un paso al costado y deja su puesto al barranquillero Antonio Julio de la Hoz. El equipo naufraga en un décimo lugar y lo espera la final del año contra un imparable Deportivo Cali que con 35 fechas invicto, se perfilaba como gran favorito para conseguir el de nuevo la estrella.

El jueves 12 de diciembre de 1969, en el estadio Pascual Guerrero de Cali, el Unión Magdalena daría una de las principales sorpresas del fútbol local al vencer, en el primer partido de la serie, con un solitario gol de Aurelio Palacios a los 58 minutos de juego. La gran figura del encuentro fue su portero Justo Ramón Sayas. La revancha estaba fijada para el domingo 15, el Deportivo Cali tendría que salir con todo su arsenal en el estadio Eduardo Santos de Santa Marta para revertir el resultado, ellos solamente tendrían que aguantar pero esto no iba a ser tarea fácil.

Con nerviosismo pero algo de confianza, al haberle quitado el invicto a su rival, saltaron a la cancha. Vieron como el sueño de ser campeones, de un momento a otro, se alejaba cuando el brasileño Iroldo marcó el primero para el cuadro vallecaucano; Jorge Ramírez Gallego aumentó la cuenta. Tan sólo iban 27 minutos y el estadio ya había enmudecido con el 0-2.

En el entretiempo De la Hoz da ánimos a sus jugadores, nunca habían estado allí y tal vez jamás llegarían otra vez, tenían que dar el todo por el todo.

Para la segunda parte, el Unión dio crédito a su mote y fue un “ciclón”. A los diez minutos Raúl Peñaranda marca el descuento, renace las esperanza en las tribunas, los hinchas empiezan a comerse las uñas, ahora la lucha es contra el peor enemigo, el tiempo.

Faltaban tres minutos para la conclusión del encuentro cuando Ramón “Moncho” Rodríguez recibe un balón cerca del centro del campo, mete un derechazo potente que baña al portero caleño que estaba adelantado, ¿gol? Si, gol, y Unión Magdalena campeón.

El partido no pudo terminar, los enfervorizados hinchas invadieron la cancha y el arbitro pitó el final. 

Después de varias décadas en la primera división, el elenco “bananero” sufrió su primer descenso en 1999, dos años más tarde se recuperó y volvió a primera para volver a caer en el 2005 a la división B de la cual tardaría en regresar trece años. 

3 comentarios:

hannibalazul dijo...

Apasionante esta pagina del FPC, ojalá el Ciclón Bananero vuelva soplar en La A

cityground dijo...

Desconocía la historia del Unión Magdalena, a ver si vuelve pronto a la Primera colombiana, buen artículo.

ricardo martinez dijo...

excelente articulo, Dios nos de esa alegria y vuelva a ver al ciclon en la A y campeon,....